Actividades
Exposiciones
Mi nube personal
Alicja Panasiweicz
14.05.25 04.06.25
Como cierre del proyecto de residencia que Alicja Panasiweicz vino a realizar en el estudio de ´ace en colaboración con Adam Panasiewicz, el colectivo presentó una instalación compuesta por múltiples elementos en la Sala Políglota.
Durante su residencia, la artista desarrolló un proyecto artístico inspirado en la vida y obra del escritor polaco emigrado Witold Gombrowicz, quien llegó a Buenos Aires en 1939 y se encontró inesperadamente en el exilio. Su confrontación con una realidad ajena, moldeada por la imaginación y el desplazamiento cultural, se convirtió en el punto de partida de las exploraciones autoetnográficas de la propia Alicja. Este encuentro con lo desconocido -imaginado pero real- abrió un rico espacio para la reflexión y la creación artísticas. En su proyecto, titulado Mi nube personal, la artista exploró la idea de presencia y lugar a través de composiciones olfativas. Mezclando aromas asociados a su propia identidad y entorno con otros descubiertos en Buenos Aires, creó velas de cera perfumada que, una vez quemadas, liberaban experiencias multisensoriales.
La obra investigaba lúdicamente la colisión, la fusión y la inmersión en un nuevo contexto, ofreciendo una metáfora poética del diálogo cultural y la memoria sensorial.





Texto curatorial
Alicia Candiani
La poética de lo extraño
14.05.25
My nube personal: Alicja Panasiewicz y la poética de lo extraño
Durante casi veinticuatro años, el escritor polaco Witold Gombrowicz vivió en la Argentina como extranjero. Su mirada, aguda y descentrada, se convirtió en una lente que tensionó las estructuras culturales locales e iluminó, con ironía y lucidez, las zonas más ambiguas de la identidad nacional. Como otros viajeros antes que él —aquellos artistas europeos del siglo XIX que cruzaban el Atlántico para retratar lo exótico del “Nuevo Mundo”—, Gombrowicz registró la alteridad del paisaje, la arquitectura, los modos sociales y hasta el clima. Pero lo hizo desde un lugar radicalmente distinto: no como turista ilustrado, sino como sujeto implicado, desplazado, afectado por una extranjería que pronto se volvería existencial.
Es desde ese mismo gesto —entre la observación minuciosa y la transformación poética— que Alicja Panasiewicz construye My Personal Cloud/Mi nube personal. Inspirada por el desembarco de Gombrowicz en Buenos Aires en 1939, pocos días antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial, la artista polaca reactiva esa experiencia de extrañamiento y la traduce en una investigación visual, olfativa y espacial. Su obra, lejos de ilustrar un relato, pone en juego un modo de habitar y percibir el mundo desde el descentramiento, desde la nube subjetiva que cada quien lleva consigo. Esta lucha entre el yo y el entorno da lugar, metafóricamente, a algo muy similar a una “nube subjetiva”: un campo de percepción deformado por lo biográfico, lo afectivo, lo sensorial.
En este proyecto, Panasiewicz se vale de materiales sensibles: cartografías intervenidas, registros autobiográficos y velas de cera perfumadas (en las que destaca el aroma de la yerba mate y el humo). Las velas son vaciados escultóricos de los elementos cotidianos que aparecen en las fotografías del escritorio de Gombrowicz: lápices, tinteros, anteojos, piezas de ajedrez, un largavista…utensilios de una intimidad suspendida en el tiempo. Encendidas, estas velas activan una dimensión afectiva y efímera: evocan no solo la fragilidad de la memoria, sino también el lento derretimiento de una presencia fantasmal, que se consume mientras ilumina. La instalación se complementa con un video basado en un escaneo 3D de una maqueta de la misma mesa. Se utilizó el efecto de un error digital (glitch)generado durante el proceso de escaneo, lo que acentúa aún más la atmósfera surreal de desorientación espacial y las relaciones entre los objetos, que parecen tener vida propia.
Desde una perspectiva auto-etnográfica —en la que la artista-investigadora se convierte en sujeto y objeto de estudio a la vez—Panasiewicz entrelaza capas literarias, identitarias y culturales en un lenguaje que desafía los límites tradicionales de las artes visuales. Como Gombrowicz en Transatlántico o Diario argentino, su gesto no es el de explicar una cultura, sino el de habitar la incomodidad de lo no resuelto, de lo contradictorio, de lo movedizo. My Personal Cloud (Mi nube personal) se presenta así como una deriva contemporánea del viaje del extranjero: no ya para representar el mundo desde una mirada superior, sino para compartir —con todos sus pliegues y grietas— la experiencia de percibir desde un lugar otro. Un gesto profundamente político y poético.
Witold Gombrowicz (1904-1969)
fue un novelista y dramaturgo polaco, nominado al Premio Nobel de Literatura en cuatro ocasiones consecutivas. Vivió durante 24 años en Argentina, a la que consideraba como su segunda patria. En Buenos Aires, aunque vivió en relativa pobreza y mantuvo una relación ambivalente con la comunidad polaca en el exilio, encontró también un laboratorio existencial y literario desde el cual escribir gran parte de su célebre Diario y desarrollar su pensamiento crítico sobre Europa, Polonia y la condición humana.
