Janet Day
Amarillo [Argentina]

Janet Day es una artista textil y tejedora de toda la vida, criada por pintores y moldeada por una infancia dedicada a explorar los colores ocultos en las plantas, la tierra y los desordenes cotidianos.

Lo que comenzó como ropa manchada y curiosos experimentos se convirtió en una práctica artística dedicada, basada en tintes naturales y la creación sostenible de colores. Su fascinación por los procesos cromáticos la llevó finalmente a crear Around the World in 80 Dyes (Alrededor del mundo en 80 tintes), un proyecto destinado a compartir las fuentes de color de la naturaleza con un público más amplio. Su investigación reciente se centra en los tintes naturales que producen el amarillo, un color aparentemente sencillo pero infinitamente variable. Las flores, las cortezas y las raíces producen amarillos que van desde los más brillantes a los más terrosos, desde los tonos naranjas cálidos hasta los mostaza o marrones intensos, cada uno de ellos transformable mediante el pH, el calor, los métodos de remojo, los mordientes y los aditivos.

Durante su micro-Residencia de dos semanas en Proyecto´ace, se concentró en dos plantas tintóreas autóctonas de Argentina: el fustic (fustete), una madera utilizada históricamente para producir el verde caqui de los uniformes militares de la Segunda Guerra Mundial, y la oxalis, una flor apreciada por su resistencia al desteñido. Su trabajo exploró las posibilidades que estas plantas aún ofrecen hoy en día, probando cómo las condiciones y los procesos contemporáneos pueden ampliar su potencial cromático.

STATEMENT DE LA ARTISTA

Los residuos de cocina, los residuos de jardín, las flores silvestres, los árboles, los insectos, la tierra e incluso los escombros de construcción pueden crear colores profundos y vivos para las fibras y los tejidos. Tomo los tejidos resultantes y los convierto en colchas únicas, a menudo representativas de la zona donde se encontraron las fuentes de tinte. Utilizo los elementos y los procesos para crearlos, con el fin de demostrar que una industria tan dependiente de los colores creados químicamente no tiene por qué ser así.